En el arte no siempre se es claro cuando se piensa demasiado,
siempre hay una cuota de inconsciente, que refleja la verdad,
aunque nosotros no lo veamos hasta terminada la obra.
Ponerme frente a un bloque de arcilla blanda y “JUGAR”,
con pocas herramientas sobre todo con mis manos, a hacer
lo más lindo que te da la arcilla, que es disfrutar de ella,
sentirla y percibir cómo quiere ser. Jugar y realizar todas
las formas y texturas que van apareciendo, sin pensar en algo
conocido, sin condicionar los sentimientos en relación a ese
material tan noble que deja que tus manos hagan de él lo que
surge de tu espíritu.
Cada una es única e irrepetible, como los momentos de la vida
en que me acompañan. Todas dicen algo de mí o del momento
en que viví cuando fueron creadas. Es imposible desligarlas del
pensamiento o los sentimientos. No es ver una imagen linda y
recrearla, para mí es más verdadero hacer lo que siento.
Gracias por tomarte tu tiempo para conocerme
y saber lo que siento… Nati